
Los jugadores de Diablo 3 recientemente enfrentaron una terminación inesperada de la temporada en los servidores coreanos y europeos debido a un "malentendido" de comunicación interna en Blizzard. Este final prematuro provocó la pérdida de Progress y restablecimiento de alijos para los jugadores afectados, lo que provocó una frustración significativa. La situación contrasta marcadamente con la generosidad reciente mostrada hacia los jugadores de Diablo 4, quienes recibieron mejoras gratuitas y un personaje de nivel 50 para compensar los cambios en el juego introducidos en parches recientes. Estos parches dejaron obsoletos muchas de las primeras versiones y elementos del juego. El incidente resalta los desafíos de comunicación dentro de Blizzard, particularmente en relación con el soporte continuo de Diablo 3, al mismo tiempo que muestra los esfuerzos de la compañía para retener a los jugadores en Diablo 4. Esta disparidad en el trato subraya los desafíos continuos que enfrenta Blizzard en la gestión de su diversa cartera de juegos, especialmente considerando la longevidad de títulos como World of Warcraft y las complejidades de remasterizar juegos clásicos.